Del Mas Alla

Todas esas casitas del barrio Nuevo Coral eran iguales por fuera pero de diferentes colores. La de Estrella era azul turquesa subido. La de Pura en la otra esquina, de un rojo escandaloso. Tambien los vecinos del Barrio Nuevo Coral sembraban plantas diferentes. En el patiecito al frente de Pura habia un palo de mango muy grande. Frente a Estrella habia una pequena jungla de crotos abandonados y sin podar. Todas las casitas eran de tablas de madera con techo de un pico y con tres escalones que daban al balconcito. La puerta a la sala estaba en el centro del balcon. Habia otra puerta al fondo de las casitas y casi todo el mundo mantenia ambas puertas abiertas para que entrara fresco. La sala rectangular daba todo el ancho de la casa y desembocaba en un pasillo en el centro con dos dormitorios pequenos iguales a cada lado. Luego a la derecha habia otros dos cuartos aun mas pequenos, y al fondo un banito a la derecha y una cocinita a la izquierda que se tragaba el pasillito cosa que la puerta de atras era la puerta de la cocina al patio.
En la casita de Pura, donde vivia con su nieta Puri, el cuarto de atras al lado de la cocinita era su cuarto de coser porque ademas de ser la espiritista del barrio Pura era costurera. El cuarto al cruzar del tallercito de costura era el dormitorio de la vieja, la anciana. Estrella estaba alli, sentada en la cama de Pura, sobre la colcha de chenille blanca con rayitas desgastadas de peluchin y en el centro unas florecitas rojas y azules destenidas por las muchas lavadas. Por la ventana que daba al patiecito de al lado se veia un palo de aguacate sin nada de fruta. Seria macho? Que mala suerte si le salio macho el palo despues de esperar tanto tiempo a que pariera.
Pura estaba recostada en un silloncito de caoba pequeno con asiento de mimbre. Su cuerpecito pequeno estaba hundido contra el respaldo de mimbre y su mono de pelo gris se estaba deshaciendo aun tan temprano por la manana. Tenia los ojos cerrados detras de sus espejuelitos redondos con marcos de acero. Su respiracion era lenta y profunda. Se habria dormido? La vela que Pura prendio en la
mesita debajo del cuadro del sagrado corazon, en frente de la virgen de yeso, temblaba con la brisa. Suavecito, por la pared, se escuchaba el radiecito de Puri. Cuando Pura condujo a Estrella hacia su cuarto pasaron al lado del cuarto de Puri que quedaba al lado de la sala. La joven estaba tirada en su cama oyendo boleros. Estrella se metio al cuarto y le dio una ojeada al reguero de ropas en una sillita, y de cajitas de polvo, lapices de labio y de cejas, en la coqueta con una sayita rosada. La colcha de la cama era rosada tambien, y las tablas de la pared estaban pintadas de un rosado subido, rosa vieja le decian. Puri apenas miro a Estrella. Sobre la cama tenia una caja de caramelos de chocolate. Se estaba chupando uno y cuando Estrella la beso aspiro ese olor delicioso que le aguo la boca. Claro que Puri no ofrecio, si apenas miro a Estrella y no le devolvio el beso.
Que le pasara a esa muchacha? Algo le habra pasado en el City las muchas veces que su madre Pura se la llevo a vivir con ella. Sabra dios cuantos maridos se habria echado Pura desde que el padre de Puri la dejo para irse al City cuando Puri tenia quizas un anito de vida.
De repente Pura solto una voz ronca, rara. Estrella ceso sus chismes interiores. Era una especie de grunido de dolor.
"Quien va?" Pura hablo en su propia voz. La voz ronca contesto. "Soy Ramon."
Y quien carajo sera Ramon? Estrella una vez tuvo un Tio Ramon pero casi ni lo conocio porque se fugo al City despues que se peleo con el abuelo y el viejo le echo una maldicion y lo tiro del balcon. Nunca supo porque fue que el viejo lo boto. Era uno de esos tios jovencitos con edad de ser primos. Pero si...tendra que ser ese Ramon.
"Dejenme en paz. A que vienen a joderme al mas alla?" Pura hablo de nuevo con voz de Ramon. "Esa muchacha que no venga a pedirme na sin darme algo primero. Deje cosas por hacer. Asuntos serios."

Estrella salto de dos en dos los escalones que daban del portal al patiecito del frente de la casita de Pura, y le paso por debajo al enorme palo de mango que Purita habia sembrado de nina. Las dos trenzas grises de Estrella tambien saltaban. Hablo en voz alta. "Mira que de vieja meterme a casa de Pura que se puso a ver muertos hace tiempo pero donde nunca antes me meti porque no creia en esas mierdas." Ser espiritisa era el joseo de aquella vieja, digamos mejor anciana por respeto. Dona Pura tenia que sacar dinero, o regalitos, de alguna parte porque su marido se pasaba dia y noche con un palito buscando botijas por los montes. Para que le servia al anciano aquel terrenito que tenia cerca de la Cuesta en las afueras de Coral si no le daba ni las viandas para la familia, mucho menos para vender? La hija Purita les mandaba chavos del City donde trabajaba en alguna factoria si no sera que es puta...asi decian...Pero lo que mandaba Purita no daba a basto para mantener a Pura, a su viejo y a la hija de Purita, otra Pura a quien le decian Puri, aquella que casi ni hablaba ni saludaba.
Bajo desbocada la cuesta de la Calle de los Escolares hacia el parquecito de los papalotes al lado del rio. Miren que ir a la espiritista y tener que enterarse que su ancestro era un grifter de primera...Ladron, tramposo. Venir a enterarme de tremenda mierda asi."

Just like that, as she approached the kite park, she began to think in English. Pura's words kept running in her head, in Spanish, of course. "Aquel Ramon era el gran tramposo." This had been after the sesion when the two of them were sitting in taburetes in Pura's little kitchen drinking cafe con leche and looking through the open back door to the patio at her plantings of cilantro, cilantrillo, hierba buena and other herbs Estrella didn't recognize. "Lo que te cuento ahora no me vino del mas alla. Conoci a aquel Ramon desde que era nino y hasta que se fue p'al Norte cuando tu abuelo lo boto."
Estrella was almost jogging. "He shouldn't be coming to me in dreams." She said this out loud as she happened to be passing America who was on her way back from her morning run on the path joggers had worn into the ground along the Guacabon. They'd made the road by jogging..She laughed to herself at her own joke just as America said, "Como?" They hugged and kissed each other on the cheek. "Hablando sola o conmigo?"
"Pura just gave me a big fright."
They walked together to the small food cart on the corner where Calle de los Escolares dead ended at the park and bought cafes con leche and walked over by the water. They sat on smooth river rocks.
"Do you believe in mensajes del mas alla?"
America said nothing but her oval face, framed by a halo of pushed back short gray hair, showed she was listening and her mind was completely with Estrella, no matter what she herself thought about the mas alla.
"It started with a dream." Now Estrella was back in English. "In the dream there was a pale, ghosty silhouette embracing a dark one. There was a lot of foliage all around. Maybe they were in a jungle?." I had the dream one night, and then after that I started having some version of it every night for a week. "The dark shape has claws and the claws are dug into the right side of my head just where I've been getting my headaches. And that's the reason I went to look for Pura. Before the dreams, and almost from the moment Gildo desaparecio, I started getting headaches, like nails driven into the right side of my head, just above the ear all the way to my temple."
America took Estrella's hand. "O my god. I know what you started to think. Just because Gildo is desaparecido and maybe coming to you in a dream does not mean he's dead. Los vivos tambien mandan mensajes"
"Why is he desaparecido? Why has he not sent me a single message? Porque yo lo bote. Le dije que era el trago o yo. El escogio el trago. A no ser que se lo llevo la guardia. No se si me dejo por borracho o por revolucionario. Pero fui you quien lo boto. Quien lo tiro por el balcon como le hizo mi abuelo a mi Tio Ramon. Fui yo quien lo abandono. So I thought Gildo was the ghosty figure in my dreams digging nails into my head giving me the headaches so I don't forget him. Is he asking me for help?"
"Lo lindo es que resulta que dice Pura que el que se me aparece no es Gildo. Es un incordio Tio mio que se llamaba Ramon. Mi abuelo le echo una maldicion y lo tiro por el balcon."
"A santo de que?"
"No me acuerdo."
"Y mientras tanto desde que se fue Gildo no me atrevo a nada. Apenas me atrevo a salir de la cama por la manana."
"Y como dice Pura que te puedes deshacer de este espiritu burlon?"

Pegaron a caminar. They took off walking along the Guacabon. It was a glorious morning and the sun was climbing up El Pico toward the middle of the sky. The river was a moving slab of dark green water. "Mira el agua." America walked toward the river rocks again and lay belly down on a wide boulder. She stuck her hand into the stream. "Parece un onyx verde." Estrella said and joined her. "The dream is telling me something but Ramon didn't say anything much. Only, "Escuchame" in a gravelly voice. Pura told me to wait for the dream tonight and if what he wants isn't clear next time I come to her and she'll think of something to offer him so he tells me why he's coming. This time she said, traeme aguacates del pais. No se ni donde los consigo."
"Es que fui a verla por las jaquecas y por saber de Gildo y ella dice que me las manda Ramon. Que hay algo que tengo que hacer, algo que tengo que sentir."
They finished their cafes con leche, got up from their river rock, and tossed their paper cups into the fire pit the boys would light up that night into a bonfire the way they did every night in memory of the desaparecidos. Without speaking they strode together toward the bridge.
"In my opinion los muertos always tell us the same thing. Stop living like we're castigados. Start living like we're free." America took Estrella's hand and pulled her away from the water, back to Calle de los Escolares. "When we ran into each other I was heading to Catalina's and now I just decided we're both going to head there together."

They climbed Calle Escolares' steep hill to the Plaza and walked through it. Padre Ezequiel was there with his cohort of young men, using la glorieta as a climbing wall. Several of the boys were perched on the top and were just placing la bandera del dia underneath the green and black Karayan flag and the blue red and white City flag. Today's banders was a black and white one, the same design as the Karayan flag. It was the emblem of the desaparecidos and meant that tonight the bonfire would be huge. La colonia China de Coral was out in their usual morning big numbers, some doing Tai Chi and others line dancing or doing intricate ball room dances in pairs and groups. The two women crossed the cobble stoned street, climbed the steps to the sidewalk under the portales, walked to the middle of the block and into the Farmacia. Nobody was at el mostrador. They rang the bell on the counter. Don Maximo ran in from the back, his and Catalina's living quarters. "Ya se que no vienen a comprar remedios." The women stepped behind the counter and followed Maximo past the pila in the middle of the patio, under the buganvilia and the hanging orchids, to the row of rooms beyond the pila, and into the middle room where Catalina was dead lifting a loaded barbell.

"Hay que ponerse fuerte para el holocausto climatico." Catalina retumbo el piso al bajar las pesas. "Ayer me meti el dia en el Refugio de la Cuesta excavando albergues. No se crean que me pongo fuerte na mas qu pa lucir."
Estrella y Amparo soltaron las carteras en una mesita entre las dos puertas que daban de la habitacion al patio y comenzaron sus estiramientos y sus calistenias para el calentamiento.
"Ustedes tres siempre estan vestidas para sus workouts." Don Maximo se rio. "No tienen que lucir profesionales detras del mostrador."
Catalina le dio un beso. "Mirenlo. Con los sweatpants de la cintura p'abajo y la chaqueta blanca de farmaceutico de la cintura p'arriba." Le abrio el boton superior. "Y observen. Tiene su t-shirt cosa que en 5 segundos se quita la chaqueta y esta listo para su workout."
Maximo les dijo adios con su enorme mano. "Que disfruten su poder fisico mujeres guerreras. Las veo a la hora del almuerzo."
America se trepo en el trampolin y empezo su rutina de saltos y squats.
"Ponte aqui." Catalina tomo a Estrella de la mano y la hizo reclinarse sobre el weight bench. Puso el barbell en su puesto y aseguro las pesas. "Te anadi peso porque tienes cara de que tu cuerpo necesita botar algo. Necesita hacer un esfuerzo maximo para botar algo." Mientras tanto Amparo saltaba en el trampolin.
Estrella elevo las pesas y Catalina tuvo que ayudarla a sosternerlas.
"No puedo."
"Si puedes."
Logro sus tres sets. "Casi me muero." Cerro los ojos y descendio a algun abismo. Sin abrir los ojos empezo a gritar unos gritos desgarrados y a temblar. Arrodilladas a ambos lados del weight bench Catalina y America la sostuvieron mientras su cuerpo se estremecia de pies a cabezas. Cuando Estrella al fin abrio los ojos y se sento en el bench casi grito. "Ya se porque se me aparecio el espiritu de Ramon."
Catalina se sento en el weightbench a la derecha de Estrella y le puso un brazo sobre los hombros. Americq la imito a la izquiera y le paso el brazo por la cintura. Estrella se derritio en el abrazo de las dos mujeres y comenzo a llorar. "Ese llanto es antiguo." Catalina le hablo con ternura. "Ese llanto lleva esperando mucho tiempo." America susurro. "Sigue llorando." Otra oleada de llantos surgio desde el fondo del abismo que Estrella acababa de visitar.
"Llantos asi," dijo Catalina, "no se pueden sentir ni llorar solitas cuando se es nina. "Pero ya no estas sola." America anadio, "Y ya no eres nina."
"Y como hacerles estos cuentos a ustedes? Me dan demasiada verguenza. Como anadir estos cuentos a mi historia? Como me atrevo?'
"Bueno, los cuentos siempre han estado ahi clavandote sus pezunas en la cabeza dandote esas jaquecas. Si los sacas del olvido perderan las unas. Dejaran de controlarte y ayudaran a explicarte."
Estrella respiro hondo. Y solto las palabras. "Ramon me metio un dedo cuando muy nina. Yo estaba en panales en el patio de atras de la casa de mi abuela. El estaba construyendo un papalote. Tenia unos papeles de colores preciosos, turquesa, rosado, violeta. Yo tendria menos de dos anos y el tendria unos doce. Me aparto el panal y me hundio un dedo en el centro de mi cuerpecito. Yo no se cuantas veces me habra hecho eso."
"No hay prisa, amiga. Dejate temblar. Deja que tu cuerpo desahogue esta herida que ha esperado tantos anos por ver el aire.
Los llantos de Estrella le estremecian el cuerpo. Se aferro a Catalina con ambos brazos. America le cubrio la espalda con su pecho. Cuando dejo de estremecerse Estrella volvio a hablar.
"Recuerdo que cuando yo era mayorcita y estaba de visita en casa de mi abuela Ramon nos llevo a su hermana Diosa, que me llevaba tres anos, y a mi a uno de los casinos de Arrecife. Su esposa tenia mala barriga y no quiso acompanarnos. Era mi primera vez en una barra. Me compro mi primer trago de alcohol, una cosa empalagosa con sabor a almendra. En el carro me invito a sentarme al frente y me subio la mano debajo de mi saya. Dos noches despues se me metio al cuarto donde yo dormia con su hermana Diosa. Ella y yo compartiamos una cama enorme. El acababa de salir del bano y tenia una bata de casa roja de cuadritos negros. Se paro en la puerta y se abrio la bata. Yo nunca antes habia visto un pene, mucho menos uno erecto. El de Ramon hacia una curva. Luego de mujer supe que todos los penes no eran asi. Se quedo alli en la puerta muerto de la risa varios minutos hasta que Diosa lo mando al carajo. Ramon se fue a su habitacion al otro lado del bano, al frente de la de Diosa, donde su mujer NIeve ya se habia echado a dormir.
Ese mismo verano me invito a acompanarlo a recoger a Nieve donde trabajaba de dependienta en Por Departamentos, aquella primera tienda en Coral que trataba de parecerse a las tiendas del City. Pero de camino Ramon me metio a un bayu. Yo no sabia que clase de sitio era ese. El entro su cacharro a un garajito, uno de una fila de varios garajes. Un hombre aparecio. Tio Ramon le dio dinero. Me mando a salir del carro y entramos a un cuarto con una cama de postes y un bano sin puerta con una ducha sin cortina y un inodoro sin tapa. Me llevo de la mano a la cama y me trato de quitar la ropa y me trato de besar. Yo estaba azorada. Paralizada. Ni siquiera habia besado en la boca a nadie. Yo estaba como uno de esos animales que se fingen muertos para que no los maten. En esa condicion me quito los blue jeans. Otra vez le vi el pene erecto, curvo. Ni cuenta me habia dado que el se habia desnudado. Se me quiso trepar encima. Me acerco aquella bestia que le salia de entre las piernas, me aparto los pantis, y trato de metermela.
No se de donde me salio la voz pero le hable estrujao. "No quiero. Siempre quise que mi primera vez fuera por amor."
Siguio tratando.
No se como se me ocurrio treparme al marco de la cama para alejarme de el.
"No quiero. Quiero que mi primera vez sea por amor." Segui repitiendo la misma cosa.
Lo empuje con la mayor fuerza que pude en ese instante sacar de mi cuerpecito. Yo era pequena, delgada, y el hacia un par de anos que habia engordado, despues de casarse, y habia echado tremenda barrigona.
Al fin logre que me mirara a los ojos. "No Ramon. No quiero."
Se puso de pie con rabia. "Deja ver como mato esto." Se senalo el pene que seguia parado, curveado. Se metio a la ducha. No se si se masturbo pues no quise mirar aunque desde la cama se veia todo. Enseguida me vesti. Salimos sin decir ni una palabra y recogimos a su esposa en la acera frente a Por Departamentos que estaba en esa epoca al cruzar la plaza, todavia no se habia mudado al primer mall en la carretera de Coral. Ella tenia una barrigona casi tan grande como la de el porque le faltaba un par de meses para darle a luz a la primera hija de Ramon. No se si el nunca llego a conocerla porque ahora me acuerdo porque fue que mi abuelo lo boto. De alguna forma, y sin que lo supiera Nieve, la mujer de Ramon, el abuelo se dio cuenta que Ramon me abusaba. Quizas ya se lo habia hecho antes a alguna otra sobrina o nina del barrio. O quizas lo vio saliendo del cuarto de Diosa con la bata abierta. O quizas algo nos vio en las caras cuando regresamos de recoger a Nieve aquella tarde y el abuelo estaba sentado en un sillon en el balcon. Miren que olvidarme que mi abuelo me defendio. Porque ahora si me acuerdo. Nieve no lo supo pero a mi el abuelo me llevo a pasear por el Rio y me dijo, "Yo se lo que te esta haciendo Ramon. Y eso yo no lo permito." Esta tarde lo vi hablandole a Ramon sin dar ni un grito. De repente el abuelo, que era delgado pero muy fuerte, agarro a su hijo menor, y lo tiro del balcon al patiecito.
Las tres mujeres caminaron de brazos a la hamaca que Catalina tenia suspendida en la esquina izquiera de su cuarto de ejercicios. Se treparon y se acurrucaron como pequenos fetos trillizos en una barriga acogedora. La hamaca se mecia. America tarareaba duermete mi nina. La luz tenue que entraba por las dos puertas, sombreadas por la buganvilea que se trepaba sobre el pasillo al patio, la poca claridad que se filtraba entre las muchas orquideas que guindaban del techito del pasillo, creaban una atmosfera amniotica y sanadora. Las tres descendieron a un medio dormitar y se sonaron una sola mujer.

A la noche Estrella regreso a donde Pura, esta vez con America. Sentadas las tres en la cocina pusieron a la anciana al dia. Pura se puso de pie. "Hay que apaciguar al muerto ese."
Entraron al dormitorio de Pura. Ella prendio la vela y se sentaron juntas las tres en la cama.
Ramon llego pronto. La voz ronca que le salia del fondo de la panza a Pura dijo clarito, "Tengo mucha gente a quien pedirle perdon porque estoy cansado de no estar ni en el cielo ni en el infierno."
"Dinos lo que tu quieres para dejar a esta mujer en paz."
"Ya sabras tu." DIjo la voz y se quedo callado aunque esperaron largo rato para que volviera a hablar.
Pura medito buen rato con los ojos cerrados.
"Vamo a la fogata."
Ya era entrada la noche y se veian las llamas desde la cuesta de Calle Escolares. Cuando se acercaron al parque del rio ya habia un grupo enorme congregado gritando consignas. "Devuelvanlos ya." "No nos moveremos hasta que no vuelvan."
Pura se situo entre las dos mujeres y les tomo la mano. Empezo a rezar. "Santisima virgen, lavale los pecados a Ramon para que deje a Estrella en Paz. LLama a todos sus ancestros ascendidos para que lo guien, lo acompanen. Perdonalo porque no sabia lo que hacia. Dalo por perdonado." Estrella se estremecia al oir estas palabras casi tiernas. Le rodaban las lagrimas por la cara. Las rodillas se le vencieron y tuvo que agarrarse de Pura y de America para no caerse.
En ese momento el grupo de la fogata comenzo a moverse hacia el puente. Cuando llegaron al centro empezaron a tirar cenizas de la fogata al agua, nombrando a sus desaparecidos y gritando, "Presente." Pura le puso un manojo de cenizas a Estrella en la mano. "Di su nombre y echa las cenizas hacia el rio." Estrella solto las cenizas hacia las aguas. ""Ramon". Susurro el nombre. "Otra vez, mas alto." "Ramon." Repitio el nombre con una voz fuerte y clara. Pura se acerco mas al muro del puente y se inclino. "Ramon, tus ancestros te reciben. Tus actos genocidas no fueron de los peores. No hay ninguno de nosotros en Karaya que pueda decir que jamas se confabulo con el genocidio. Nosotras sanaremos las heridas que le hiciste a Estrella. Ella misma se sanara junto con todos los que luchamos por la liberacion para erradicar toda huella del genocidio. Tus ancestros te reciben. Tu abuelo te alza de nuevo al balcon. Se sentaran juntos en los sillones del balcon de la eternidad."
Las tres mujeres, tres de un centenar, contemplaron en silencio las aguas del Guacabon.
"Falta algo," dijo America. "Le entrego un manojo de cenizas a Estrella." Las amigas se miraron a los ojos. Estrella inclino la cabeza. Miro hacia el rio. Abrio la mano. Y al caer las cenizas hablo con una voz clara, confiada, segura. "Gildo. Gildo, presente." Estrella comenzo a llorar y temblar. "Y entonces Gildo donde esta?" Pura la abrazo. "Un dia d'estos lo vamos a encontrar. No hay gente muriendose. Solo hay gente viva y gente muerta, asi que aqui o en el mas alla un dia d'estos encontramos a Gildo."
"Pero yo, como vivo? Mientras tanto, como vivo?"
"Ay m'hija, hay que seguir viviendo en el mismo medio del desastre."

Regresaron hacia la Plaza juntas acompanadas por el gentio de los que aun no habian desaparecido, y que todas las noches rezaban por los desaparecidos. el gentio de los que seguian vivos.
Primero dejaron a Pura en su casita colora y luego America acompano a Estrella a su casa turquesa. "Buena visita al mas alla." Estrella echo una gran carcajada. Las amigas de abrazaron corazon a corazon.